Bodevici, la heladería ecológica | Barcelona

¿Alguna vez has probado un helado de queso de cabra? Pues Bodevici te ofrece entre tantos este helado que para mi sorpresa me sorprendió muy gratamente.

Esta heladería, que se encuentra en Gracia, tiene los mejores helados de Barcelona! No sólo por los deliciosos sabores de las diferentes variedades que ofrecen (chocolate, leche merengada, frambuesas, avellana, coco, queso de cabra, menta chocolate, etc) sino que también por el «bioconcepto» que hay detrás. Es una heladería sostenible 100%. Sus helados son procedentes de Agricultura Ecológica (es decir sin colorantes, ni conservantes, sin productos químicos de síntesi…) y los envases son biodegradables. Una pizarra define claramente lo que bioconcepto significa, que más allá del «reciclaje», acoge la salud, la sostenibilidad, el cuidado por el medio ambiente y por las personas.

Bo de vici, heladería ecológica

El creador y propietario se llama Jordi, que con la idea en mente se fue un año a la fábrica artesanal de helados, que actualmente le abastece, a conocer el oficio. La relación de colaboración con dicha fábrica es muy estrecha y le permite el hecho de modificar y adaptar los helados al gusto del consumidor. El equipo de empleados, todos ellos encantadores y conocedores de cada una de las composiciones de los helados, hacen que el servicio sea estupendo y te puedan especificar cualquier cosa que les preguntes.

Bo de vici, heladría ecológica

Con el objetivo de evitar la estacionalidad del producto, y con ánimos de estar abiertos durante todo el año, también sirven chocolate caliente, cocas de cristal, yogur con frutas y zumos, todo ello de agricultura ecológica.

Los helados son aptos para celíacos, hay algunos sin lactosa y otros sin azúcar.

Si sois atrevidos, os gusta el helado y el queso de cabra, os animo a probar el de queso de cabra! Es muy suave y os prometo que os sorprenderá en positivo.

Dirección: C/Torrijos 21, 08012 Barcelona  –  C/Astúries 2, 08012 Barcelona

Web oficial de bodevici.


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La Font d’en Ribas

Desde mi querido amigo el Casino de la Rabassada, al que aprecio con cariño y visito de vez en cuando con devoción, se puede llegar fácilmente a dos fuentes: la Font de la Rabassada, que formaba parte de los jardines del casino y, unos pocos metros más adelante, la Font d’en Ribas, una de las fuentes más bonitas de Collserola. También se puede acceder a estas fuentes por otros caminos del bosque.

Font d'en Ribas, Collserola

Esta fuente, construida en 1909, de estilo modernista, se realizó para lo que debería haber sido la casa de Lluís Ribas, una de las fortunas más grandes de Barcelona por aquel entonces, que había heredado, como sobrino, el legado de los hermanos Rossend, Frederic i Lluís Regodosa. Para este proyecto contó con el arquitecto Emili Sala i Cortès. Pero al morir sin descendencia, su mansión nunca se acabó, y lo único que se llegó a construir, y que aun hoy en día podemos ver, es un viaducto, los fundamentos que el bosque se ha ido tragando y la preciosa fuente rodeada de vegetación y humedad a la que los rayos del sol poco alcanzan. También se dice que no era una casa lo que quería construir, sino un hotel, viendo la posibilidad de hacer negocio estando situado al lado del gran hotel del Casino.

La ermita de Juan Bosco, Tibidabo

¿Quién no conoce el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón? Ya hará más de 50 años que la iglesia del Sagrado Corazón viene coronando el pico más alto de la sierra de Collserola y se ha convertido en un símbolo emblemático de la ciudad y del skyline de Barcelona que deja a espaldas el mar. Obra de Enric Sagnier i Villavecchia, arquitecto que nos ha dejado un gran legado arquitectónico en la ciudad de Barcelona, empezó a construirse en 1902 y no finalizó hasta 1961 en manos ya de su hijo Josep Maria Sagnier i Vidal. El Templo consta de dos partes, la cripta en la parte inferior, de estilo neobizantino, y la iglesia, en la superior, de verticalidad gótica.

Templo Expiatorio del Sagrado Corazón, Tibidabo

A finales de s.XIX, tras los rumores de construcción de un hotel-casino (que acabó construyéndose cerca del lugar, véase Casino de la Rabassada), una «Junta de Caballeros Católicos» adquirió los terrenos y los cedió a Juan Bosco durante su visita a Barcelona.

En 1886 se construyó una pequeña ermita neogótica, que actualmente está adosada a la iglesia, y que sigue siendo lugar de peregrinaje para muchos católicos.

Ermita Sagrado Corazón, Tibidabo (Barcelona)

La ermita, testigo de los cambios que ha ido sufriendo Barcelona a lo largo de los años, también compartió espacio con un pabellón de estilo mudéjar que hizo de mirador durante la Exposición Universal de 1888. Unas vistas que siguen siendo admiradas desde este punto álgido de la ciudad pero desde el que se vislumbra un panorama muy distinto al de entonces.

La Cuina d’en Garriga, colmado y café

Lugar pequeño y encantador que hace de colmado de productos de calidad y con denominación de origen y en donde al mismo tiempo se puede degustar un desayuno o una merienda, o hasta picotear algo para comer escogiendo alguna cosa que te haya llamado la atención.

Restaurante Tienda la Cuina d'en GarrigaUn pasillo cargado de productos bien dispuestos lleva a la única mesa del local en la que se puede llegar a compartir una conversación con algún que otro desconocido mientras se come. Las posibilidades de picoteo son varias, quesos, embutidos, tostadas, pero también ofrecen comida casera y natural.

La Cuina d’en Garriga no solo vende comestibles, sino que también utensilios de cocina, y es que el inspirador de este pequeño negocio es el sifón. En la imagen no se distingue bien, pero si observáis detrás de la letra G se puede intuir esta «herramienta» indispensable para el vermut. Si entráis en la web de la Cuina d’en Garriga, veréis la historia que hay detrás.

Yo he ido varias veces a desayunar y alguna vez a tomar un pequeño aperitivo de queso y vino y a parte de disfrutar del entorno, he cultivado mi paladar.

Dirección: Consell de Cent 308, 08007 Barcelona

Teléfono: 93 215 7215

Horario
Lunes a sábado de 09:30h a 21:30h
Domingos de 10:00h a 15:00h


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Cup & Cake Barcelona

Con un sabor agridulce me despido del verano, y qué mejor para la depresión post vacacional que alegrar el día con un pastelito y con un buen café de agricultura ecológica en un entorno tranquilo y agradable.

Cup & Cake Barcelona, pasteles artesanales

Cup&Cake es una cafetería que se dedica a la elaboración de mini pasteles artesanales al estilo americano. Aunque tienen forma de magdalena, no lo son, son mucho más dulces tipo merengues o glaseados pero adaptados al paladar mediterráneo utilizando menos mantequilla y menos azúcares. El nombre cup & cake se dice que proviene del uso de la taza como molde, a falta de éstos tiempos atrás.

Cup & Cake Barcelona, pasteles artesanales

El espacio es pequeño pero acogedor con un estilo rústico y diáfano y se comparte la gran mesa de madera con otros comensales.

También sirven tostadas y bocadillos, pero su especialidad y lo que hacen con más cariño son estos pastelitos.

Dirección: C/Enric Granados 145, 08008 Barcelona


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Santa Maria de Collserola

Carretera de les Aigües, 21h.

Después de correr unos pocos km en buena compañía, mi «entrenador» me descubrió a Santa Maria de Collserola dirección al turó d’en Cors, uno de los cénits de la sierra.

Se trata de un sencillo y pequeño santuario de ladrillos y azulejos, con la imagen de Santa Maria de Collserola, que desde su diminuta vitrina rota «per un cop de roc llançat amb massa traça»¹ observa al Sagrado Corazón situado en lo más alto del Tibidabo.

Santa Maria de Collserola, Barcelona

El acceso a este punto (que queda por encima del km 6, más o menos, de dicha carretera) es a través de caminillos sorprendentemente frondosos y estrechos, entre medio de un bosque medio tenebroso al que parece que unos gigantes se hayan hecho paso tirando los pinos que se interponían a su caminar.

Y es que la nevada de hace dos años arrancó de raíz a los pinos más débiles del bosque siguiendo así el curso de la teoría de la evolución.

Bosque Collserola, Barcelona

La verdad es que el encanto del lugar me ha traído a recorrerlo varias veces más en poco tiempo y siempre con alguna anécdota que contar.

Ayer mismo, por uno de los caminitos estrechos y frondosos, me adelantó un ciclista a una velocidad moderada.

De repente, escuché un ruido más abajo, pero descarté una caída por ser un ruido demasiado suave.

Pero mi sorpresa fue cuando me encontré, unos metros más abajo, al ciclista ¡engullido por una zarza!

De ahí el ruido suave, aunque para él de suave no tuvo nada. Mi primera reacción fue asustarme y le pregunté si estaba bien. Al ver que solo tenía algunos rasguños y después de responderme que si estaba bien, mi siguiente reacción fue sonreír, cosa que él también hizo. Porque, aunque desafortunada, la situación no dejaba de ser graciosa.

Al margen de la anécdota, os animo a recorrer los bosques de mordor, ya sea en bici o a pie, en busca de gigantes misteriosos y de la virgen de Collserola.

1. Referencia a la poesía de «La vaca cega» de Joan Maragall.


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Fuentes de Josep Campeny en Barcelona

Los grandes monumentos hacen de Barcelona una ciudad largamente conocida e importante, los pequeños monumentos hacen de Barcelona interesante y especial para los que vivimos en ella. Por eso hoy hablaré de unas pequeñas fuentes que seguramente hayáis visto alguna que otra vez, pero que probablemente nunca os habéis parado a observar, porque forman parte del decorado urbano desde hace casi 100 años.

El 19 de Diciembre de 1912 se colocaban estas tres fuentes creadas por Josep Campeny, ganador del concurso para realizar este proyecto de ornamentación de la ciudad.

Fuentes de Campeny, Barcelona

La primera de ellas es la «Font del trinxa» (fuente del trincha), situada en Ronda Universidad con Pelayo, y se trata de un niño que reposa sobre la fuente y aguanta el surtidor de agua.

La segunda es la «Font del noi dels càntirs» (fuente del niño de los botijos), situada en la Plaza Urquinaona, en la que se ve un niño con dos botijos. En este caso hay dos grifos de agua independientes de la estatua.

La última de ellas es la «Font de la granota» (fuente de la rana), situada en Diagonal con Rosellón. En esta fuente aparece un niño con un sombrero de paja que sujeta una rana, la boca de la cual hace de surtidor sobre la pica que podría simular un charco.

La tres fuentes son de bronce que el paso del tiempo lo ha tornado verdoso. Las partes de piedra, extraídas de la antigua cantera de Montjuïc, ahora un espacio protegido, se han ido erosionando a lo largo del tiempo pero todavía se pueden ver los grabados de estilo modernista.

Fuentes desapercibidas dan de beber al sediento si consigue encenderla, ya que dos de ellas se activan con un botón que cae en un lateral de la piedra.

Más fotos de las fuentes de Campeny.

Os propongo un pequeño recorrido por si alguien se anima a hacer la ruta de las 3 fuentes. Según el orden que lo hagáis, podéis acabar tomando algo en La Farga de Avenida Diagonal.


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Frutos secos al horno de leña

Frutos secos tostados, tienda barcelonaEn una de las calles colindantes a Santa Maria del Mar, Sombrerers 23, se encuentra una pequeña tienda artesanal dedicada al tueste de frutos secos. Ya lleva más de siglo y medio, desde 1851, trabajando en este oficio. El nombre original era Casa Gispert, al que luego se añadió las iniciales de los hijos del fundador, Enric y Alfons, y más adelante «mestres torradors» (maestros tostadores), quedando como nombre definitivo y actual marca de los productos «E&A Gispert Mestres Torradors«.

En sus orígenes era un almacén de productos coloniales que con la marca SABOR comercializaba al por mayor café, té, cacao, especias y azafrán procedentes de las Américas. Más tarde se especializó en tostar frutos secos y café.

Hoy en día, aunque la tienda ha sufrido pequeñas remodelaciones, conserva el mobiliario de época que le otorga un aire de otros tiempos. En una pequeña vitrina guardan una balanza, que pesaba lo que era el fruto seco antes y después de tostar y la diferencia de peso se retornaba al comerciante.

Pero sobretodo, lo más preciado y lo que le da el sabor especial a los frutos secos, es el horno de leña que tostaba las almendras de nuestros tatarabuelos. Un cilindro de hierro, que antaño se hacía rotar manualmente, hace unos 70 años que ya dispone de un dispositivo automático y facilita el trabajo a los dependientes. Montones de leña de encina se acumulan al lado del horno y cestas colgando de la pared esperan a ser rellenadas por el fruto seco humeante.

Tienda frutos secos tostados, barcelona

Avellanas, almendras, pistachos, nueces, reposan recién tostadas en cestas de mimbre para ser compradas. En los estantes y rincones de la tienda se pueden encontrar otro tipo de productos como café o especias que se comercializan con la marca «E&A Gispert mestres torradors». Todo el comercio respira un aire artesanal que le otorga mucha personalidad y en donde imaginarse a los trabajadores de entonces no es difícil.

Fotos de la tienda E&A Gispert mestres torradors.

Dirección: C/ Sombrerers 23, 08003 Barcelona

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Restaurante Taverna del Clínic

Restaurante la Taverna del Clínic, BarcelonaHablando de tapas… hace mucho tiempo que quiero hablar de uno de los mejores restaurantes de raciones de Barcelona, «La taverna del Clínic». Aunque el espacio no es muy acogedor y la iluminación un tanto estridente, las raciones son estupendísimas!! Después de haber repetido varias veces y haber probado diferentes cosas, sin duda las patatas bravas (las de la imagen), que son de las mejores que he probado, junto con el iglú de pulpo, suelen ser mis peticiones casi obligatorias cada vez que paso por esta taberna. Estoy en linea con las recomendaciones de tapasBCN! Todos los demás platillos son también exquisitos, y os propongo pedir según temporada.

Los hermanos Simôes, fundadores del restaurante en 2005, comentan en la web del restaurante: «Nuestro concepto de pequeñas raciones y la calidad del mejor producto fue y sigue siendo nuestro motor de impacto en el mundo culinario y lo que nos diferencia de los demás»

Su ubicación no es muy céntrica, y eso lo hace puramente barcelonés, quedando alejado de los lugares turísticos habituales. De todas formas tampoco está muy alejado del centro y en un golpe de metro se llega en un momento. Eso si, reservando con antelación, que siempre está a tope.

Adjunto aquí la carta. Y para averiguar más, la web de La Taverna del Clínic.

Dirección: C/Rosselló 155, 08036 Barcelona

Teléfono: 93 410 42 21


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Salida nocturna en un vagón de metro de 1924

Salida nocturna metro 1924

La verdad es que TMB tiene muy buenas iniciativas y el paseo subterráneo en metro por la historia de Barcelona es una. Y es que este pasado jueves sacaba a relucir varios vagones de la serie 300, los que el 30 de diciembre de 1924 inauguraron el Gran Metropolitano de Barcelona y que estuvieron activos más de 60 años, hasta 1987. ¿Alguien los recuerda?

Inauguracion metro 1924 Barcelona

El exterior del tren es granate, negro y dorado y se conserva de maravilla. En el interior, con fluorescentes incorporados en 1949, no se ve una diferencia abismal con los actuales. Pero tiene su gracia ver las pequeñas indicaciones de época como «Prohibido terminantemente escupir», carteles que hoy en día ya no existen, pero que podrían seguir vigentes.

Ruta nocturna metro BarcelonaEl arranque del metro fue bastante brusco consiguiendo desequilibrar a más de uno, hecho que hizo soltar alguna risa y consiguió que trasladarnos en el tiempo fuera más sencillo.

Durante el viaje nos acompañaron dos revisores disfrazados de época y contamos con la inestimable presencia de Gaudí, que iba contando la historia del metro de Barcelona.

Ruta nocturna metro Barcelona

Lo que no me gustó fue la aglomeración de gente. Hubiera preferido pagar algo más, y ser unos cuantos menos, porque si los vagones constaban de 24 asientos, debíamos ser unas 50 personas por vagón. Al menos esa fue la sensación.

Parte de la gracia del recorrido era que se hacía un transbordo y se llegaba a una estación fantasma de los años 60 que nunca fue usada como tal. Había oído hablar que la decoraban especialmente para el evento, pero no fue así, y no dejaba de ser una estación como cualquier otra, eso si, con un pequeño refresco y tentempié de chocolate que hubiera preferido obviar a esas horas de la noche pensando en las horas que me quedaban por dormir.